Yo por aquí también he estado de vacaciones, y es que mi familia venía a visitarme por unos días (llegaron el día 7 y se fueron el 24), así que he "gastado" todos los días libres que me quedaban para estar con ellos y viajar por Estados Unidos. El viaje lo estuve planeando un poco mientras aún estaba escribiendo la memoria del proyecto, y lo terminamos de decidir cuando viajé a España en junio, así que hubo tiempo suficiente para coger buenas ofertas de hoteles y vuelos :)
Lo primero que hicimos fue visitar la Casa de la Cascada, de Frank Lloyd Wright, que se encuentra a una hora en coche de Pittsburgh. Luego volvimos para almorzar en Mount Washington (con las vistas impresionantes del Downtown), y para rematar el día fuimos a un partido de béisbol, que jugaban los Pirates y había que animarlos, que los pobrecitos son muy malos, jeje. La mala suerte fue que llovió un chaparrón y no pudimos ver terminar el partido porque lo suspendieron.
Al día siguiente nos levantamos tempranísimo porque teníamos que coger un avión a las 7 de la mañana con destino a San Francisco :) Lo primero que hicimos fue almorzar unos bocadillos que llevábamos preparados en Union Square, y luego alquilamos bicicletas para cruzar el puente Golden Gate hasta un pueblo llamado Sausalito desde el que se coge un ferry para volver a San Francisco. Al día siguiente fuimos a la plaza del Ayuntamiento, visitamos la isla de Alcatraz, y dimos un paseo por el Embarcadero, Ghirardelli Square, Lombard Street y el Palacio de Bellas Artes.
Al tercer día que estábamos en San Francisco, alquilamos un coche con el objetivo de recorrer la costa de California hacia el sur a través de la famosa Ruta 101, con destino Los Ángeles. Por el camino fuimos haciendo paradas en Santa Cruz, almuerzo en Shell Beach, repostar gasolina en Santa Bárbara o asomarnos a las playas de Malibú :) Por cierto, suerte que íbamos con un GPS que nos evitó quebraderos de cabeza con los mapas que llevábamos, jeje. Ya al caer la noche llegamos al hotel, situado en Redondo Beach, una ciudad al sur de Los Ángeles. La apoteosis final fue cenar en la Cheesecake Factory, que nos pillaba justo enfrente del hotel :)
El primero de los días en Los Ángeles lo echamos entero en el parque de Universal Studios, un parque temático de la famosa compañía cinematográfica, que a pesar del incendio que sufrió a principios de junio, estaba completamente operativo :) Había un tour alrededor de los estudios donde ruedan series como "CSI" o "Mujeres desesperadas", y donde rodaron películas como "Regreso al Futuro" (allí estaba el Delorian), "Tiburón", "Psicosis" o "El Grinch". Luego en lo que ya es el parque, tienen diversas atracciones: películas con efectos 3D sobre "Shrek", "Terminator 2" y "Los Simpsons", espectáculos como el de "Waterworld" y montañas rusas sobre "Parque Jurásico" y "La Momia". También había exhibiciones de animales actores y de efectos especiales (fuego y explosiones sobre todo). La verdad es que todo estuvo genial, a pesar de tener que esperar alguna cola más larga de la cuenta :P
El segundo día en Los Ángeles comenzó yendo a la playa y pegándonos un bañito en el Pacífico. Luego aprovechamos que teníamos el coche y subimos hasta el letrero de Hollywood, bueno, lo más cerca que pudimos. Luego bajamos a la zona del paseo de las estrellas y el teatro Kodak, donde se realiza la ceremonia de entrega de los Oscars. También estuvimos en el teatro chino, donde en el suelo es donde los actores y actrices famosos marcan las huellas de sus manos y pies en cemento. Para terminar el día, pasamos por el Downtown de Los Ángeles y luego fuimos a la playa de Santa Mónica (la de los vigilantes de la playa), y cenamos en su famoso muelle. El sitio elegido fue Bubba Gump, una cadena de restaurantes especializados en gambas inspirada en la película "Forrest Gump", cuya tienda de regalos no tiene desperdicio (camisetas con frases de Forrest buenísimas, jeje).
Ya al día siguiente teníamos que devolver el coche alquilado y coger un vuelo rumbo a Chicago, donde pasaríamos solamente una noche, ya que al día siguiente regresábamos a Pittsburgh a reponer fuerzas. A pesar de contar con sólo 24 horas en "la ciudad del viento", nos dio tiempo a pasear por el puerto, subir a la Sears Tower, ver el Museo de Arte, almorzar la famosa "stuffed pizza", tomar un barco por el lago Michigan y el río Chicago, y finalmente pasear por Millenium Park. ¿Alguien da más? jajaja :) Chicago se ha convertido en la ciudad que más veces he visitado aquí en EEUU, y no me canso, casi es mi favorita, jeje.
Bueno, hasta aquí la primera parte del viaje que me he pegao con mi familia hace unos pocos días. En breve escribiré sobre la segunda parte, y ya volveré a contar cosas de la vida en Pitt :)
Espero que todo vaya bien por allí. Besos y abrazos a todos!!